Artículo en Negratinta sobre el debate del 7-D:
Más
allá de promociones desmesuradas y adjetivos sobrecargados de adrenalina (se
llegó a calificar el plató como “santuario sagrado de la pasión política”), el
debate ha sido, por encima de todo, una especie de primera puesta en escena del
panorama político que se presupone para la próxima legislatura. Cuatro partidos
con posibilidad, no tanto de gobernar, como de influir de forma decisiva en la
formación y en las futuras decisiones del gobierno elegido. Este es al menos el
dibujo oficial. Veremos si la realidad de los resultados electorales termina de
colorear ese mapa esbozado hasta ahora por las encuestas y los medios.